La dormitorios de los más peques de la casa son un espacio de comodidad y fantasía desde los primeros meses de vida. Una habitación infantil pasa por diferentes fases según la edad de los niños, en el momento de cambiar la cuna por una cama podemos aprovechar para darle un ambiente más divertido y juguetón a este espacio que más tarde habrá que readaptar otra vez con la llegada de la etapa adolescente.
En esta ocasión nos vamos a centrar en aportar ideas para la decoración de una habitación infantil. Esta vez ya conocemos a los más peques, sabemos algo de su personalidad, sus gustos y este puede ser un buen comienzo para plantearnos cómo vamos a decorar el dormitorio. Como padres de la criatura, seguro trabajáis en este proyecto con mucha ilusión para construir un ambiente hermoso y cómodo que satisfaga las necesidades del pequeño residente.
La decoración de la habitación de los niños varía según el sexo, tema, tamaño de medio ambiente y presupuesto disponible. En cualquier caso, es posible montar un espacio divertido, agradable y capaz de ser recordado más allá de esta etapa de infancia.
El mobiliario y los accesorios suelen ser la misma en el dormitorio de la niña y el niño, pero la combinación de colores e ilustraciones en estética de la habitación son distintas. Cayendo en estereotipos, las chicas tienen una habitación más delicada, romántica y femenina, los niños prefieren un ambiente más sobrio.
Combinación de colores para pintar una habitación infantil
La elección de los colores para un dormitorio infantil tiene que tener en cuenta la edad del niño, porque influyen en las sensaciones. Por ejemplo, en el caso de un recién nacido, es aconsejable pintar las paredes con colores claros y suaves, de esta manera no influimos en la conducta del bebé y evitamos que se altere o se ponga nervioso. Cuando el niño crezca un poco, su habitación puede ser más colorida y estimular el desarrollo a lo largo de la infancia.
Una idea genial y que está cada vez más de moda es la opción de pintar una de las paredes con pintura pizarra para que den rienda suelta a su imaginación. La pintura pizarra o de tiza no tiene porque ser negra, la hay de colores como rosa, verde, lila…
Por otro lado, si queremos hacer de la habitación de los más peques un espacio divertido, qué mejor que recurrir a murales temáticos en las paredes o si no queremos ir tan allá, la colocación de divertidos vinilos dará un aire muy alegre al dormitorio.
También podemos pintar la habitación de dos colores, por estética o para crear ambientes diferenciados, por ejemplo, la cama con la zona de juegos.
Hemos dicho antes que los estereotipos clásicos para la elección de colores según el sexo del niño son el rosa, amarillo o lila para las chicas y el azul o verde para los chicos, pero podemos trabajar con este color en asociación con un tono neutro, como blanco o beige. A estas edades también es una buena idea colocar un papel pintado estampado o con rayas en dos colores.
Sentiros libres para combinar colores, solamente tener en cuenta evitar la asociación de tonos que representan fechas conmemorativas, como el verde y rojo para la Navidad, el naranja y negro para Halloween, o también colores de banderas o equipos de fútbol, por ejemplo… También recuerda no crear desarmonía en la habitación de los niños.
Algunas ideas clásicas para pintar habitaciones de niños, estas no fallan:
- Azul claro y marrón.
- Verde y blanco.
- Beige y blanco.
- Amarillo y azul.
- Azul oscuro y blanco.
- Beige y verde.
- Verde, naranja y amarillo.
- Azul claro, azul oscuro y naranja.
- Azul, amarillo y blanco.
Ahí van otras combinaciones siempre acertadas para elegir colores para el dormitorios de niñas:
- Rosa y blanco.
- Gris y rosa.
- Amarillo y blanco.
- Lavanda y gris.
- Verde y rosa.
- Rosa fucsia y rosa claro.
- Color salmón y turquesa.
- Azul claro y rosa.
- Verde y amarillo.
Pero recuerda que en la imaginación está el límite, y que para gustos… los colores.